yaoming.

No se si llamar a este post "ingenuidad" o "masoquismo"
porque esta profesión al principio tiene mucho de una y luego, más de lo otro.
me explico:

NINGUN Instituto Gastronómico te forma para que veas realmente qué es y cómo es una cocina profesional.
Todo es shalalá- shalalá color de rosa. Hasta que te das cuenta que no.
Esta carrera es hard-core, es rock and roll, es militar y militancia. Y se los digo yo, que tengo muy poca experiencia pero reveladora, de abre-ojos, como operar a un ciego con láser, como tener miopía sin saberlo y que te pongan lentes, como TCM y Alta Definición, digo.

Ah no les conté: me quemé la cara. Les parecerá gracioso a los que no me vieron al momento...
 Estaba en la guayaba, licuando una crema, estaba hirviendo la mardita, ha volado la tapa de la licuadora y tará~: Two-Faced Instantáneo, Alá.
 Tenia la exacta máscara del fantasma de la Ópera en el lado derecho de la cara hecha en crema antiquemaduras.
Al final me quedo una quemada encima de la ceja de color rubí oscuro que todo el mundo confundió con una mancha de tinte para cabello (soy peliroja, ahora)
Humillante.

Por lo pronto, se acabó mi tiempo de recesión creativa y espiritual.
Estoy experimentando en mi cocina, poniendo en practica todo lo que aprendí y dándoles mi propio toque creativo.
Mi dulcísima Brighid volvió a acogerme en su seno y no paro de hacer cosas nuevas.

Gio